La dieta vegetariana se basa en evitar el consumo de carnes y, de acuerdo al tipo de vegetarianismo que se practique, pueden o no incluirse productos derivados de la explotación animal tales como lácteos o huevos (ovo-lacto-vegetarianos).

El número de familia que deciden seguir una dieta vegetariana va en ascenso y cada día mas personas la incorporan como su modo de vida y de alimentación. Sin embargo, cuando se trata de iniciar a nuestros bebes en este tipo de dieta surgen muchas dudas acerca de su seguridad y sobre cómo implementarla. Por esto, a continuación revisaremos algunos aspectos que pueden contribuir a aclarar estas dudas y a realizar una introducción exitosa de la dieta vegetariana.

De acuerdo al tipo de vegetarianismo que se practique será necesario prestar atención a determinados nutrientes para garantizar el buen estado de salud, por lo que se recomienda que al decidir iniciar algunos de estos regímenes alimentarios se consulte con el nutricionista.

Lactantes Vegetarianos

La Academia Americana de Pediatría establece que una dieta vegetariana o vegana puede ser saludable para los lactantes, siempre que sea planificada cuidadosamente con el equipo de salud para asegurar las necesidades de proteínas, vitaminas y minerales, y evitar posibles carencias nutricionales.

La principal fuente de proteínas y nutrientes para los niños menores de 6 meses es la leche materna o la fórmula de inicio (incluida la fórmula a base de soja para bebes veganos o vegetarianos estrictos).

En las madres de bebes alimentados con lactancia materna exclusiva podrá indicarse un suplemento de vitamina B12 y de no incluirlo en su dieta, habrá de incluirlo en la dieta del bebe. Del mismo modo, aquellos bebes que consuman menos de 32 onzas (960 ml) de leche materna o fórmula podrán recibir la indicación de agregar un suplemento de vitamina D a su dieta diaria.

El inicio de la alimentación complementaria se llevará a cabo de la misma manera que en los bebes no-vegetarianos y una vez que se inicien los alimentos sólidos podremos ofrecer otras fuentes de proteínas tales como el queso, el yogur (de leche de vaca o de soja) o los huevos, en caso de que la familia los consuma, o las legumbres y sus derivados como el tofu o los garbanzos, lentejas, alubias, los frutos secos y los cereales fortificados.

Las dietas vegetarianas y veganas deben realizarse con la vigilancia y el apoyo del equipo de salud. Al igual que en el resto de los casos, se animará a las madres que ofrecen lactancia materna a mantenerla más allá del primer año para garantizar el aporte de nutrientes. Al realizar el destete podrá ofrecerse fórmula de soja fortificada con calcio y vitaminas D y B12, de acuerdo con la edad en la que se encuentre el bebé.

Niños vegetarianos

Tras el primer año de edad, resulta igual de importante prestar atención a ciertos nutrientes y sus fuentes para asegurar un adecuado crecimiento y desarrollo.

Las bebidas (conocidas comúnmente como “leches”) vegetales, tales como la bebida de avena o bebida de arroz (cuyo consumo se sugiere evitar en niños pequeños por su contenido de arsénico) no han de ser utilizados como sustitutos de la leche de vaca, ya que su composición es distinta y aportarán menor cantidad de energía y proteínas. En estos casos será preferible ofrecer bebida de soja como alternativa y una dieta variada y rica en nutrientes.

Para asegurar el aporte de todos los aminoácidos esenciales se recomienda combinar cereales fortificados con leguminosas, lácteos o productos de soja. Esto puede lograrse si ofrecemos:

  • Avena con leche materna o de fórmula o con bebida de soja enriquecida en calcio para niños mayores.
    • Arroz con lentejas.
    • Palitos de pan con queso o hummus.  
    • Palitos de vegetales y pan pita con hummus.
    • Alubias con arroz o tortillas de trigo o maíz.
    • Sopa o crema de legumbres (patés de lentejas, garbanzos) con palitos o tostadas de pan.
    • Garbanzos con huevo cocido y vegetales.
    • Ensaladas o hamburguesitas preparadas con cereales como la quinoa y legumbres.

Para cubrir las necesidades de vitaminas y minerales prestaremos atención a sus fuentes alimentarias.

En el siguiente cuadro se resumen aquellos alimentos que podrán ser grandes aliados a la hora de evitar deficiencias en la dieta vegetariana:

NutrienteFuentesObservaciones
Hierro  Legumbres: garbanzos, lentejas. Panes y cereales fortificados e integrales como los copos de avena. Vegetales de hojas verdes tales como broccoli, espinacas* y acelgas*. Frutos secos.Ofrecer frutas o jugos de frutas ricos en vitamina C (cítricos) junto a estas comidas puede favorecer e incrementar la absorción del hierro que contienen. *Las espinacas y acelgas se ofrecerán a partir de los 9 meses e intentando espaciar su consumo debido al alto contenido de nitratos. Tras los 12 meses se podrán ofrecer con mayor frecuencia.
CalcioLeche materna o fórmula infantil Lácteos: queso y yogurEn niños veganos considerar la utilización de suplementos o alimentos fortificados tales como las leches vegetales y sus derivados.
Selenio  Mantequillas de frutos secos (maní, almendras, avellanas) Panes y cereales. Huevos. 
ZincLegumbres (garbanzos, lentejas, alubias…) Frutos secos y semillas Cereales fortificados Huevos 
Vitamina B12Leche materna y fórmula infantiles. Extracto de levadura. Huevos. Leche y productos lácteos. Productos de soja. Bebidas vegetales (revisar etiquetado). Suplementación.Suplementar a partir del inicio de la alimentación complementaria
Vitamina DSuplementación. Bebida de soja, cabra o vaca fortificadas y enriquecidasSe ofrecerá la suplementación hasta que sea capaz de cubrir al menos 1 taza de leches de soja, cabra o vaca al día.
Ácidos grasos omega 3 y omega 6Aceites vegetales (oliva, lino…) Semillas de lino o de chía Nueces y otros frutos secos Cereales integrales Huevos 

Si quieres conocer más acerca de cómo diseñar un plan de alimentación vegetariano que sea equilibrado y cubra las necesidades de tu peque, no dudes en acudir a consulta para resolver estas y otras inquietudes.